Julián Peralta nos escribió esta vez sobre la fiesta de Ciudad:
"Ciudad, alma de barro" fue el título del espectáculo que se montó este viernes 25 de febrero en la Plaza Independencia para celebrar la fiesta de la Vendimia 2011 de la capital.
Uno de los personajes principales fue "La ciudad" que, interpretada por la actriz Silvia del Castillo, relataba la historia de la Ciudad de Mendoza en su 450º Aniversario. La historia estaba conjugada por los más de 150 artistas que lucieron los coloridos trajes de la época colonial, mientras que la "Ciudad Antigua" - interpretada por Alicia Cásares - contaba cómo se vivía en aquel tiempo.
Unas de las escenas más aclamadas, fue una creativa y humorística interpretación de roedores que rondaban en la ciudad y se alejaban por la limpieza que había en esta comuna capitalina. Ademas, uno de los personajes más aplaudidos y que centró la atención de los mas pequeños fue el antiguo Tranvía que se deslizaba por toda la escenografía.El clima despejado acompañó el entusiasmo de los 9.000 presentes estimados. Los artistas y los técnicos que estuvieron un poco más de una semana preparando está gran celebración, quedaron contentos con la convocatoria.
Como en otras ediciones anteriores, se escucharon malambos, zambas, tangos y una milonga que homenajeaba a los clubes fundadores. Al final resonó una vez más el Himno de la Ciudad de Mendoza, mientras que el público con un alto entusiasmo aplaudía a todos los artistas presentes. Todo este clima que duró un poco más de 70 minutos dejó a todos los presentes con una sonrisa y un gran furor interior.
Luego, como no se podía esperar más, comenzó el escrutinio mientras que las 12 candidatas esperaban el resultado final. Por cada voto que se escuchaba, las barras no dejaban de alentar a su favorita.El cantado de votos fue ligero y veloz. Al final del mismo el público presente consagró la nueva reina de Capital 2011: Natalí Lorena Calderón, representante del barrio San Martín con 46 votos. Mientras que la virreina fue la reprensentante de la 6º sección María Florencia Bonaceto, con 45 votos.
Como siempre es bueno una crítica constructiva, nos gustaría comentar que desde el público no fue buena la vista del espéctaculo.
ResponderEliminarEl escenario estaba a la misma altura que las sillas (por ello entre persona y persona), cosa que no pasaba otros años en el Parque Central. A esto hay que sumarle una valla por encima del nivel de los ojos, lo que impedía ver bien qué estaba pasando y la fiesta perdía valor.
Lo que sí fue muy bueno: un par de pantallas que traducían toda la fiesta a lenguaje de señas. Único lugar donde lo hemos visto permanente.